“No hace ruido, tiene una gran maniobrabilidad y se desplaza con suma facilidad. Se nota que es una máquina en condiciones, muy bien hecha”. El encargado del Cementerio Municipal de Rosas (Gerona), Jaume Calpema, no duda al trasladar las primeras impresiones del producto adquirido a Marco Taller para facilitar el trabajo de los operarios del camposanto de la localidad del Alto Ampurdán.
Se trata de una camilla dotada con un motor eléctrico que posee una autonomía de más de 8 horas que permite los traslados sin apenas esfuerzos. “Supone un gran cambio para nosotros. En ocasiones tenemos que desplazar los ataúdes cientos de metros, se nota mucho la mejora. Además, hemos realizado más de 35 servicios sin cargar la batería”, explica Jaume Calpema.
Este modelo lleva adaptada, además, una tijera de elevación para acceder a los nichos más altos. Esta implementación no impide que sea, por otro lado, una máquina muy compacta, como detalla el responsable del cementerio de la localidad gerundense: “Viene muy bien para movernos por pasillos estrechos, y su versatilidad permite girar cómodamente y pasar de una calle a otra”.
GRANDES CLIENTES, GRANDES IDEAS
El producto diseñado específicamente para el Cementerio Municipal de Rosas se completa con una bandeja giratoria para introducir el féretro con comodidad. Este elemento forma una gran combinación junto a las ideas y el trabajo de los clientes de Marco taller, con mucha experiencia en el trabajo: “Hemos colocado una alfombrilla de goma con un grosor de apenas 10 centímetros y con este sistema el féretro no se mueve ni un milímetro. La verdad es que todo va muy bien”, añade el operario municipal del camposanto rosense.